lunes, 14 de noviembre de 2011

El Gigante Egoista

¿QUIEN NO LEYÓ O LE CONTARON EL FAMOSO CUENTO DE OSCAR WILDE, EL GIGANTE EGOÍSTA?
Recuerdo a mi padre contándome el cuento cuando era niño, claro que después cuando aprendí a leer y a comprender me di cuenta que solía “endulzar” el cuento con agregados de su propia cosecha. De hecho hoy en día lo felicito por la capacidad de inventiva que tenía y por el resultado final que siempre conseguía, hacerme dormir, no sin antes llorar un poco porque el gigante se moría.
Lo que nunca me pasó fue soñar con el gigante, que me perseguía, que me quería comer con papas fritas, nada de nada, ni siquiera soñé con su jardín de gigante, con los niños jugando entre los árboles, o con su amigo el ogro.
Investigando respecto a los sueños, y leyendo por ahí me percaté que soñar con gigantes significa varias cosas, por ejemplo:
Soñar que le persigue un gigante, realizará sus ambiciones
Soñar que ve un gigante a lo lejos, recibirá una herencia
soñar que se halla ante un gigante, será capaz de vencer a sus enemigos y tendrá mucha suerte
Soñar que se convierte en un gigante, tiene complejo de inferioridad
y otras yerbas más...
Puede ser que jamás soñé con ese individuo porque como era un niño no tenía ambiciones, la única herencia que hubiese recibido eran las deudas de mi familia, no tenía enemigos, no creo en la suerte, y aun no sabía que era la inferioridad.
Hoy, ya grande, aun no sueño con ese sujeto, pero como me dijo un amigo hace 15 años como mínimo, “no creo en los sueños, porque cuando uno duerme con hambre, sueña comiendo”
Entonces tendré que seguir soñando que se me caen los dientes…

No hay comentarios:

Publicar un comentario